Hay dos tipos de espermicida, con y sin receta médica. La eficacia depende del tipo que se use. Si se utiliza sólo el espermicida de venta libre, su eficacia es limitada: cerca del 84% cuando se utiliza de forma correcta y del 79% con un uso normal, es decir, como lo utiliza la gente en la vida real.
En otras palabras:
Entre las personas que usan el espermicida correctamente todas las veces durante todo un año, aproximadamente 16 de cada 100 quedarán embarazadas sin desearlo durante el primer año.
De las personas que utilizan el espermicida de la forma normal, cerca de 22 de cada 100 quedarán embarazadas sin desearlo durante el primer año.
El espermicida de venta con receta es más efectivo, con un 93% de eficacia si se utiliza de forma correcta y un 86% si se utiliza de forma normal.